Pensar en las calles de Cusco es recordarlas empedradas e imponentes, donde los muros incas con más de 500 años de historia conviven con la modernidad entre tiendas y restaurantes muy concurridos por turistas. Sin embargo, estas mismas calles esconden historias muy curiosas y que, seguro, querrás descubrir en tu próxima visita a la Ciudad Imperial.
Uno de estos detalles es el de las siete calles con el número siete distribuidas por el centro histórico cusqueño. Caminar por ellas es ser parte de tradiciones locales, que te invitan a abrir los ojos y buscar todos esos misterios que esconden.
¿Quieres saber un poco más? Te lo contamos a continuación:
1. Siete Culebras
Partiendo de la Plazoleta Nazarenas se extiende este callejón empedrado muy pintoresco. El nombre se lo dan las 14 culebras talladas en la piedra, siete a cada lado. Antiguamente era conocida como Amaru Ccatta (Amaru es serpiente en quechua). ¿Te animas a buscarlas?.
2. Siete Angelitos
Se encuentra en el barrio de San Blas, uniendo las calles Tandapata y Carmen Alto. ¿De dónde proviene el nombre? De la figura de siete angeles pintadas en el tejado de una antigua casona por orden de Blas de Bobadilla, un residente de la zona. Verlos es un reto por su pequeño tamaño, pero no imposible.
3. Siete Diablitos
Y como todo debe tener un balance, no podía faltar la calle Siete Diablitos. Ubicada a una cuadra de Siete Angelitos, un singular personaje te recibirá. ¿Imaginas cuál es? Se dice que las parejas eran tentadas por el diablo y se escondían en esa hermosa calle empedrada, lejos de la vista de los cusqueños.
4. Siete Ventanas
Antiguamente, en este lugar se ubicada el convento de San Agustín y destacaba por justamente tener siete ventanas. Si bien hoy el lugar ha sido transformado, el nombre permanece. La encuentras en el barrio de San Blas, como continuación de la calle Runas.
5. Siete Borreguitos
Es una callecita inclinada muy pintoresca. Se la conoce con este nombre porque era la ruta usada por los locales para trasladarse con sus bultos y animales, entre ellos borregos. Baja desde la cuesta Pumacurco hasta la calle Choquechaca.
6. Siete Cuartones
Se encuentra a una cuadra de la Plaza de Armas. Recibió su nombre por los siete largueros de piedra o cuartones que se alineaban sobre el cauce del río Saphy que pasaba antiguamente por ahí. Hoy solo se mantiene uno, justo en la intersección con la calle Saphy.
7. Siete Mascarones
Es la única calle que está fuera del centro histórico, en el barrio de Santiago. Su nombre se lo da un antiguo habitante, el señor Mascareñas, quien con sus seis hijos trabajaba fundiendo cobre para hacer todo tipo de cosas, desde adornos para las puertas de las iglesias hasta clavos que se usaban en la construcción.
Te dejamos este mapa para que las ubiques fácilmente en tu próxima visita:
Siete calles. Siete historias de Cusco que quizá no conocías. Y es que así es la Ciudad Imperial: una oportunidad para sorprenderse en cada esquina. ¿Te animas?