El Valle Sagrado es el hogar de muchas comunidades, que enriquecen el territorio, con su patrimonio cultural. El arte textil es una de sus tantas formas, que además de vestir al pueblo, tiene la función de dar sentido de pertenencia, a través de sus colores e iconografías. Desde pequeñas, las mujeres de Ollantaytambo, aprenden la técnica del tejido en telar de cintura, volviéndose, así, guardianas y bastión de identidad local.
Desde hace ya varios años, el arte textil también es un medio de generación de ingresos para las tejedoras, quienes han encontrado en el turismo, un mercado para su producción. Esto les permite poder contribuir a la canasta familiar, además de sentirse económicamente autónomas.
Es importante tomar conciencia del rol que la mujer cumple en diferentes esferas, a nivel social, cultural, así como económico, una dimensión en la que todos podemos tomar parte activa. Sobre todo en la industria del turismo, cuya fuerza laboral es predominantemente femenina.
Con el propósito de impulsar el empoderamiento de la mujer tejedora, en noviembre 2021, se realizó una convocatoria desde Tui Care Foundation, entre las comunidades de Ollantaytambo, a la que se sumaron más de 100 tejedoras de las comunidades de Patacancha, Huilloc, Rumira Sondormayo, Yanamayo y Quelcanca, quienes se están capacitando en técnicas de producción, como lectura de planos y control de calidad, así como en capacidades de comercialización, para impulsar sus negocios cooperativos.
Se proyecta generar una producción de arte utilitario - que guardando las técnicas tradicionales - pueda ser comercializada por las tejedoras en puntos de venta habilitados por nuestros aliados estratégicos en Cusco, para posibilitar el precio justo por sus productos, impulsando así sus negocios culturales.